En los últimos años, más de 2 millones de mujeres y niños sin obra social en Argentina se han beneficiado de una mejora en la atención de su salud tanto en términos de cobertura como de calidad. Esto no es resultado de un hecho fortuito, sino de una iniciativa pionera en el país que se resume en dos palabras: Plan Nacer.
Este programa nacional de salud materno infantil que se lanzó en el 2004 para fortalecer la cobertura pública de salud de niños hasta 6 años y mujeres embarazadas, además de mejorar la atención médica, ha financiado equipos en los centros de salud y hospitales materno infantiles; ambulancias de traslado neonatal; programas de capacitación al personal y campañas de educación para la salud.
Pero las mamás y sus bebés crecieron y con ellos, la necesidad de una cobertura ampliada de salud pública de calidad que los acompañe.
Por eso nació el Programa Sumar, la ampliación del Plan Nacer, que incorpora a adolescentes hasta 19 años y mujeres hasta los 64 años.
Entre las nuevas prestaciones para adolescentes se brinda asistencia y orientación en temas de alcohol y drogas, violencia sexual, y salud sexual y reproductiva. Las consultas médicas incluyen controles de la vista, salud bucal, y aplicación de vacunas.
En el caso de las mujeres, se ofrecen controles clínicos, ginecológicos, vacunación, salud bucal y acceso a información en prevención de adicciones, salud sexual y planificación familiar, así como la promoción de hábitos saludables en alimentación y lactancia, entre otros.
¿Cómo funcionan el Plan Nacer y el Programa Sumar?
Bajo un esquema de financiamiento por resultados, en todo el país las provincias reciben fondos a medida que alcanzan diferentes metas sanitarias, y éstas otorgan a los centros de salud recursos para mejoras en infraestructura, equipamiento, recursos humanos, y capacitación lo que facilita una prestación efectiva de los servicios. Esto también sirve para dar una mayor transparencia en la rendición de cuentas.
El Plan Nacer ha sido replicado por países como Egipto, Marruecos y Turquía, un hecho que representa un ejemplo destacable de cooperación Sur-Sur.