Este año, se espera que los migrantes internacionales superen los 250 millones, un nivel sin precedentes, a medida que la gente sale a buscar mejores oportunidades económicas. Además, los países en desarrollo de rápido crecimiento son un imán cada vez más poderoso que atrae a personas de otras partes del mundo en desarrollo.
Como demostración de su repercusión económica, este año los migrantes internacionales enviarán USD 601 000 millones a sus familias en los países de origen. De este total, las economías en desarrollo recibirán USD 441 000 millones, según el Libro de datos sobre migración y remesas 2016, publicado a instancias de la Asociación Mundial de Conocimientos sobre Migración y Desarrollo (KNOMAD, por sus siglas en inglés) del Grupo Banco Mundial.
Estados Unidos fue el país desde donde se origina la mayor cantidad de remesas, con flujos de salida estimados en USD 56 000 millones en 2014, seguido por Arabia Saudita (USD 37 000 millones) y Rusia (USD 33 000 millones). El principal país receptor es India, con una cifra estimada en USD 72 000 millones en 2015, seguido por China (USD 64 000 millones) y Filipinas (USD 30 000 millones).
“Puesto que más que triplican el valor de la ayuda para el desarrollo, las transferencias de los migrantes internacionales representan un salvavidas para millones de hogares de países en desarrollo. Adicionalmente, los migrantes mantienen más de USD 500 000 millones en ahorros anuales. En conjunto, las remesas y los ahorros son una importante fuente de financiamiento de proyectos de desarrollo que pueden mejorar la vid y los medios de sustento en las economías en desarrollo”, indicó el coautor del Libro de datos, Dilip Ratha.
El informe ofrece un panorama de las estadísticas más recientes sobre inmigración, emigración, emigración calificada y flujos de remesas de 214 países y territorios. Se trata de una actualización de la versión de 2011 y contiene datos adicionales sobre migración y remesas bilaterales y diásporas de segunda generación, y los recientes desplazamientos de refugiados. La información proviene de diversas fuentes de datos, como censos nacionales, encuestas sobre la fuerza laboral y registros demográficos.
Además, el texto revela que la migración Sur-Sur es mayor que la migración Sur-Norte. En 2013, más del 38 % de los migrantes internacionales se trasladó desde países en desarrollo hacia otras economías en desarrollo, en comparación con el 34 % que se desplazó desde naciones en desarrollo hacia países más avanzados.
Los 10 principales países de destino de los migrantes fueron Estados Unidos, Arabia Saudita, Alemania, Rusia, Emiratos Árabes Unidos (EAU), el Reino Unido, Francia, Canadá, España y Australia, mientras que las 10 naciones de origen más importantes fueron India, México, Rusia, China, Bangladesh, Pakistán, Filipinas, Afganistán, Ucrania y el Reino Unido.
Con 13 millones de migrantes en 2013, el corredor de migración más importante del mundo es el de México-Estados Unidos. Por su parte, Rusia-Ucrania se sitúa en el segundo lugar, seguido por Bangladesh-India y Ucrania-Rusia. Estos tres últimos son corredores Sur-Sur según la clasificación de las Naciones Unidas.
“Numerosas investigaciones demuestran que la migración, de trabajadores tanto muy calificados como poco calificados, genera numerosos beneficios para los países receptores y de origen. La diáspora de los países en desarrollo y la migración de retorno pueden ser una fuente de transferencias de capital, comercio, inversión, conocimientos y tecnologías”, sostuvo Sonia Plaza, coautora del Libro de datos.
En 2014, se contabilizaron 14,4 millones de refugiados (sin incluir a los 5,1 millones de refugiados palestinos), quienes representaron el 6 % de los migrantes internacionales. Cerca del 86 % de ellos fue acogido por países en desarrollo, donde destacan Turquía, Pakistán, el Líbano, Irán, Etiopía, Jordania, Kenya, Chad y Uganda como países receptores. En cambio, las naciones avanzadas solo recibieron a 1,6 millones de asilados.
El Libro de datos sobre migración y remesas 2016 está disponible en: www.knomad.org y www.worldbank.org/migration.
La publicación seguirá siendo actualizada a medida que se disponga de datos nuevos.
Interactúe con expertos en migración en: https://blogs.worldbank.org/peoplemove/
Aspectos destacados en materia de migración y remesas regionales
Los migrantes internacionales desde Asia oriental y el Pacífico sumaron un total de 31.4 millones en 2013; de estos, casi la mitad vive en países de ingresos altos de la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE). El mayor número de migrantes provino de China, Filipinas, Indonesia, Myanmar y Viet Nam. La zona también recibió 9 millones de migrantes; el 69% provenía de la propia región, principalmente de Tailandia, Malasia, China, Indonesia y Filipinas. La remesas entrantes alcanzaron un total de USD 129 000 millones en 2015, mientras que en 2014 se enviaron USD 24 000 millones.
Un total de 31,9 millones de migrantes salió de Europa y Asia central en 2013; de estos, 46 % vive en países de la OCDE. Los países de origen más importante fueron Ucrania, Kazajstán, Rumania, Turquía y Uzbekistán. La zona también acogió a 17,2 millones de migrantes, principalmente de países de la propia región, como Ucrania, Kazajstán, Turquía, Uzbekistán y Belarús. La remesas que entraron a la región sumaron USD 36 000 millones en 2015, en tanto que en 2014 salieron USD 11 000 millones. En fecha reciente, Turquía se ha transformado en uno de los principales países receptores de refugiados sirios.
Un total de 32,5 millones emigraron de la región de América Latina y el Caribe y casi el 85% de ellos vive en países de la OCDE. Los principales países de origen de los emigrantes fueron México, Colombia, Brasil, Costa Rica y Ecuador. La zona recibió 4,2 millones de migrantes, en particular desde la propia región. Los principales países receptores incluyen México, República Dominicana, Brasil, Costa Rica y Ecuador. La región recibió un total de USD 67 000 millones en remesas en 2015, en tanto que en 2014 salieron de ella USD 6 000 millones.
Un total de 23,9 millones de migrantes salieron de Oriente Medio y Norte de África; de estos, casi el 38 % se radica en países de la OCDE y aproximadamente el 31%, en la misma región. Los principales países de origen de los emigrantes fueron la Ribera Occidental y Gaza, Siria, Egipto, Marruecos e Iraq. La zona recibió a 11,7 millones de inmigrantes, provenientes principalmente de Jordania, Irán, el Líbano, Siria y Libia, y recibió remesas por un total de USD 52 000 millones en 2015. Los países de ingresos altos (Bahrein, Kuwait, Omán, Qatar, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos) del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) de la región recibieron un aumento sustancial de migrantes en los últimos años, provenientes principalmente de Asia meridional y oriental. Estos países explican la salida de un total de USD 98 000 millones en remesas en 2014.
Los migrantes desde Asia meridional totalizaron 37,1 millones; de estos, 20,6 % se radica en países de la OCDE y casi 43 %, en países de ingresos altos no pertenecientes a la OCDE (como el CCG). Los principales países de origen fueron India, Bangladesh, Pakistán, Afganistán y Nepal. La región recibió 12,4 millones de migrantes y de estos, la mayoría es de la misma región. Las remesas hacia países de Asia meridional sumaron un total de USD 123 000 millones en 2015, en tanto que en 2014 salieron USD 16 000 millones.
Un total de 23 200 millones de personas emigraron de África al sur del Sahara; de estos, el 26 % vive en países de la OCDE y el 65,6 %, dentro de la misma región. Los principales países de origen de los emigrantes fueron Somalia, Burkina Faso, Sudán, República Democrática del Congo, Nigeria y Côte d’Ivoire. La región recibió 18 millones de migrantes. La mayor parte de quienes provienen de África (en particular de los países más pobres) emigra a otros países africanos, principalmente a Sudáfrica, Côte d’Ivoire, Nigeria, Kenya y Etiopía. En 2015, la región recibió un total de USD 35 000 millones, en tanto que en 2014 salieron transferencias por USD 4 000 millones.