Las montañas cubiertas de bosques, con pequeños valles y pueblos, se extienden hasta el horizonte en Ixtlán de Juárez en Oaxaca. El verde está presente en todos sus tonos en el paisaje.
No sorprende, viendo su naturaleza, que Oaxaca sea el Estado con mayor biodiversidad de México y sea considerado como líder nacional en el manejo comunitario sustentable de los bosques.
Además tiene un gran potencial de recursos agrícolas, como en el maíz, así como en la pesca y la ganadería, aunque todavía hay mucho espacio para su aprovechamiento y comercialización.
“Ocupamos tradicionalmente los últimos lugares en producción, en productividad y en organización en el sector agrícola, pecuario y pesca,” explica Jorge Carrasco Altamirano, Subsecretario de Producción de la Secretaria de Desarrollo agropecuario, forestal y pesca.
También tiene varios retos en otros sectores: sólo el 69.5% de oaxaqueños tiene agua en su casa y casi 19% de los hogares son considerados vulnerables porque tienen piso de tierra o techos mal hechos.
Una nueva manera de planear
“Cuando llegamos al gobierno, nos encontramos con estructuras de planeación que respondían a las necesidades anteriores, pero que no nos permitían estratégicamente enfocar la inversión del Estado”, dice Alberto Benítez Tiburcio, Subsecretario de Planeación, Programación y Presupuestos.
”Nos hemos dado cuenta que requeríamos dar un giro de 180 grados a los ejercicios de planeación realizados hasta el momento,”agrega.
