Es un acto simple y cotidiano que ocurre 34.000 veces por segundo en todo el planeta. Se coloca una bolsa con hojas secas dentro de una taza, y se vierte un chorro de agua caliente. Unos minutos después, la infusión está lista con todo su contenido benéfico, aunque en algunos casos contados, también con todos los riesgos potenciales para la salud.
Después del agua, las infusiones (incluyendo el té y otras hierbas) son el líquido más consumido en el mundo. Están presentes en todas las culturas y en prácticamente todos los hogares.
Pero el recorrido entre las hojas frescas de la plantación, hasta las hebras disecadas que van a parar a la taza, está repleto de todo tipo de riesgos. Tal vez el más preocupante de todos ellos es la contaminación, en particular la que proviene de bacterias como la salmonella o el e-coli.
Es un riesgo que conocen muy bien y que han padecido en carne propia los campesinos del distrito de Manchester, en Jamaica, a unos 100 kilómetros al oeste de la capital Kingston.
La principal fuente de ingresos de sus 190.000 habitantes es la minería de bauxita. Pero el sur, demasiado montañoso para las tradicionales plantaciones de azúcar, es más apropiado para cultivos como la menta. Hoy en día, hay más de 300 productores de menta en la zona.
“Hubo momentos en que se encontró e-coli y salmonella en la menta. Cuando eso sucedió, se desechó y no se les pagó a los agricultores. Es duro producir sólo para perder dinero,” dijo Doris Lewis, presidenta de la cooperativa de hierbas y especias de South Manchester.
Las condiciones de esta región montañosa son perfectas para cultivar plantas de primera calidad. El intenso olor de las hojas de verbena, hierbabuena, jengibre, y canela secándose al sol, así lo confirma. La mayor parte de las hojas cultivadas aquí serán exportadas a infinidad de lugares.
“Las ventas al exterior han aumentado un 150% en los últimos cuatro meses”, explica Norman Wright, director de la empresa Perishables Jamaica Limited, que compra las hojas secas y las exporta a supermercados de Estados Unidos, Canadá, el Reino Unido además de los otros países caribeños.
“Se prevé que esta tendencia se mantendrá así que siempre necesitaremos los productos excelentes de los agricultores de South Manchester”, añade Wright.