El estado de la educación en Asia meridional
Los rápidos cambios tecnológicos y la creciente competitividad que caracterizan al mundo en la actualidad obligan a los países de Asia meridional a tener una fuerza laboral bien educada y capacitada para responder a largos periodos de crecimiento. Aunque la región ha logrado enormes avances en la ampliación del acceso a la educación en la última década, un nuevo informe del Banco Mundial titulado Student Learning in South Asia (Aprendizaje de los estudiantes en Asia meridional) plantea que la baja calidad de la educación está provocando un retraso.
En este primer estudio exhaustivo sobre el desempeño de los sistemas educativos de Asia meridional en términos de aprendizaje de los alumnos, el Banco Mundial destaca dos áreas principales de preocupación. En primer lugar, casi 13 millones de niños de entre 8 y 14 años permanecen fuera de la escuela. En segundo lugar, y quizás más importante, la calidad de la educación para quienes asisten a la escuela es baja y los estudiantes no adquieren habilidades adecuadas que son necesarias en el mundo del trabajo.
Un gran número de alumnos parece estar aprendiendo poco; hasta un tercio de los que finalizan la escuela primaria carece de habilidades básicas alfabetización y aritmética. Muchos estudiantes en las escuelas rurales tienen maestros que apenas saben más que ellos. Y el acceso limitado a la educación secundaria, que es a menudo de mala calidad, agrava el problema. Halil Dundar, coautor y jefe de equipo del informe señala que “a menos que el centro de atención de la política educativa se desplace de forma explícita al mejoramiento del aprendizaje de los alumnos, las inversiones que los Gobiernos han hecho en la última década se desperdiciarán”.
El desafío de mejorar el aprendizaje de los estudiantes en Asia meridional
El aprendizaje de los estudiantes es un proceso complejo y, a menudo, puede estar influenciado por una serie de factores como los antecedentes del estudiante, las características de la escuela y las características del sistema educativo. Asia meridional enfrenta desafíos particulares que complican aún más la tarea de mejorar los resultados del aprendizaje escolar.
En primer lugar, tiene el mayor número de niños en edad escolar que cualquier otra región del mundo, y muchos son los primeros que asisten a la escuela en sus familias. En segundo lugar, los centros educativos de Asia meridional enfrentan el reto de educar a estudiantes de una infinidad sin parangón de entornos socioeconómicos y lingüísticos. En tercer lugar, en la mayoría de los países de la región hay zonas afectadas por conflictos, donde la educación afronta grandes dificultades. Finalmente, hay muy pocos datos sistemáticos sobre qué intervenciones políticas pueden mejorar el aprendizaje de los alumnos en un contexto de este tipo.