Atolón de Turneffe, BELICE – Natasha Gibson es buceadora profesional, guía de turismo y más recientemente, conservacionista de arrecifes de coral. Ella y sus colegas en la organización benéfica Fragments of Hope están investigando y ensayando varios métodos para replantar variedades más resistentes de coral que puedan ser usadas para recuperar algunos de los arrecifes beliceños, que sufren debido al aumento de la temperatura del mar, la contaminación y la destrucción de su hábitat.
“Es lo mismo que cultivar una planta común”, explica Natasha, iluminándose mientras describe su trabajo. “Tomamos brotes de coral antiguo y lo utilizamos como plántula. Esto transformó mi manera de pensar. Es increíble ver que realmente podemos replantar estos corales”.
Los arrecifes de coral son ecosistemas cruciales que se cree albergan la mayor biodiversidad de todos los hábitats del mundo. La Barrera de Arrecifes de Belice, un sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, contiene varias especies marinas protegidas y amenazadas a nivel internacional, como las tortugas de carey y los manatíes del Caribe.
Pero, y aportan puestos de trabajo que van desde la pesca hasta el turismo. No obstante, hoy en día la Barrera de Arrecifes de Belice, su biodiversidad, los puestos de trabajo y la protección que ofrece se ven amenazados por las actividades ambientales y humanas. La sobreexplotación de recursos marinos es un desafío, agravado por el impacto del cambio climático.
El gobierno y las comunidades de Belice reconocen la importancia crítica que la biodiversidad del arrecife tiene para su futuro. El pueblo beliceño, sumamente adaptado a la vida en el mar, ha notado cambios, incluidos una disminución en el volumen de pesca y el blanqueamiento de corales a causa del aumento en la temperatura del mar.
El Proyecto Conservación Marina y Adaptación al Cambio Climático en Belice (MCCAP), financiado por el Fondo para la Adaptación (Adaptation Fund), busca promover la conservación marina y las medidas de adaptación al clima para fortalecer la resiliencia climática de la Barrera de Arrecifes de Belice, entre otros. Esto incluye una mejora en la protección de los arrecifes de coral mediante la expansión de las áreas marinas protegidas y el trasplante de coral, como están haciendo Natasha y sus colegas.
Dado que también trabaja como guía de turismo, Natasha y muchos de sus colegas reconocen la importancia que los esfuerzos por recuperar los arrecifes tienen en sus ingresos como guía. “Me enorgullece poder plantar corales. Si no continuamos este trabajo, algún día pueden desaparecer por completo. No queremos que termine aquí”.
El proyecto apunta no solo a restaurar y conservar la biodiversidad, sino también a apoyar una diversificación en los medios de vida para reducir la presión sobre los ecosistemas y asegurar que las medidas de protección ambiental puedan ser llevadas a cabo por las comunidades locales, algo que a su vez eleva sus fuentes de ingreso. Esto incluye respaldar sectores como la hotelería y el turismo, estimular la formación profesional, la agricultura sostenible y la concientización en torno a la importancia de la salud general del ecosistema coralino para la resiliencia climática y el bienestar de la población.
Los egresados de la escuela no solo trabajan en la agricultura, sino que también estudian química, biología y otras ciencias. En otras partes del país, el proyecto MCCAP capacita a guías de turismo, apoya mejoras en las instalaciones para el alojamiento en familia, construye invernaderos para productores orgánicos, o envía a algunos pescadores para que se capaciten en el rubro de servicios.
La salud de la Barrera de Arrecifes de Belice es crucial para el país —el arrecife sostiene la industria pesquera y los medios de vida de las comunidades—. Se estima que el sector turístico, donde el buceo con y sin tubos de oxígeno juega un papel clave, contribuye más del 40 % del PIB, de forma directa o indirecta (FMI, 2019). A lo largo del país, las comunidades hacen su parte para recuperar y proteger este recurso crítico, con apoyo del Proyecto MCCAP. En Belice, invertir en la naturaleza significa invertir en las personas.
Última actualización: May 20, 2020