En el área metropolitana de la ciudad de Santa Cruz, ubicada al este de la cordillera de los Andes en las tierras bajas de Bolivia, viven 2 millones de personas que representan casi una quinta parte de la población boliviana. Sin embargo, a pesar de ser la ciudad más rica del país, muchos hogares de Santa Cruz aún sufren de un acceso deficiente a servicios de saneamiento.
Si bien el 49 % de los hogares accede a sistemas de alcantarillado, 182 088 hogares dependen del saneamiento in situ, principalmente fosas sépticas, y la mayoría de estas familias viven en zonas periurbanas. El Gobierno nacional, los municipios y los proveedores de servicios han tenido dificultades para proporcionar saneamiento a través de redes de alcantarillado sanitario debido al rápido crecimiento de la población.
En 2016, como parte del apoyo del Banco Mundial para fortalecer la prestación de servicios sostenibles de agua y saneamiento para los hogares más desfavorecidos de Bolivia, se puso en marcha un proyecto piloto de tres años para mejorar el saneamiento urbano en la ciudad de Santa Cruz.
Con el apoyo de la Alianza Mundial para la Seguridad Hídrica y el Saneamiento (GWSP) y su iniciativa Saneamiento Inclusivo para toda la Ciudad (CWIS), así como la Agencia Alemana de Cooperación Internacional (GIZ), el proyecto piloto se centró en mejorar las condiciones del saneamiento descentralizado. Los resultados del proyecto han orientado la formulación de la Estrategia Nacional de Tratamiento de Aguas Residuales de Bolivia y han contribuido a desarrollar modelos alternativos para la operación y el mantenimiento mejorados y seguros de los servicios de saneamiento descentralizados. El proyecto también ayudó a formular directrices, protocolos y cursos de capacitación para apoyar la recolección, el transporte y el tratamiento seguros de lodos fecales en la ciudad de Santa Cruz. Asimismo, contribuyó a exponer los desafíos que enfrentan miles de familias del área metropolitana de la ciudad de Santa Cruz para tener acceso a un saneamiento seguro.
En agosto de 2019, el Gobierno municipal de la ciudad de Santa Cruz promulgó la Ley de Gestión de Aguas Residuales y Lodos, que estableció los requisitos específicos para gestionar de manera adecuada los lodos fecales de origen doméstico. Y la autoridad ambiental —el Gobierno departamental de Santa Cruz— actualizó los trámites administrativos para emitir licencias ambientales operativas para los pequeños emprendedores que trabajan en la recolección y transporte de lodos fecales.
“Queremos seguir haciendo alcantarillado sanitario. Y nos va a costar mucho porque ya el anillo es grande y va a seguir creciendo por la migración, sobre todo. A Santa Cruz no lo para nadie, aquí viene gente todos los días y ahí es donde entramos nosotros con el sistema alternativo”, dijo el ingeniero Ramón Roca, director de Fiscalización de Proyectos en Agua y Saneamiento del Gobierno Autónomo Municipal de Santa Cruz.
El Banco participó en numerosos estudios para ayudar a evaluar la mejor manera de abordar los desafíos de saneamiento del área metropolitana.
“Y justamente en base al diagnóstico que se hizo con el apoyo de varias instituciones, es que se ha logrado determinar cuáles son esas falencias y cuáles son las necesidades que se tiene en las zonas periurbanas principalmente. En lograr identificar todo esto, toda la cadena del proceso, desde lo que es la generación, hasta el tratamiento, disposición temporal, transporte, disposición final”, señaló Ericka Plata, jefa de la Unidad de Medio Ambiente del Gobierno Autónomo Departamental de Santa Cruz. “Fue una experiencia muy importante debido a que con el Banco Mundial logramos hacer un trabajo muy integral en el cual se lograron involucrar a todos los actores".
La iniciativa también desarrolló procedimientos operativos y capacitación para los empresarios y sus empleados. Marco Salinas es el presidente del Directorio de la Asociación de Limpiezas Transportadoras de Aguas Residuales, y dirige una empresa de servicios de saneamiento. “Definitivamente se necesita. Santa Cruz ya ha dejado de ser un pueblo y necesita buenos servicios, calidad de servicios, que haya la cuestión de control del medioambiente que es lo esencial y empresas que den esa calidad del servicio, no tener solamente la herramienta sino saber cómo llegar al cliente y que el cliente sepa también exigir un buen servicio y que no cueste tanto".
Salinas elogió los esfuerzos del Banco Mundial para ayudar a organizar e intercambiar ideas y conocimientos con empresarios como él.
Si no se reconoce que todos los actores participantes tienen responsabilidades comunes, ninguna iniciativa para mejorar la gestión de los servicios de saneamiento descentralizados podría tener éxito. Es por eso que el proyecto está involucrando activamente a las varias partes interesadas.
“Cuando uno mira el tema del manejo de lodos fecales, puede verlo desde diferentes puntos de vista y evidentemente todos tienen un contenido y una participación importante. Lo que ha hecho el Banco Mundial es articular esos eslabones sueltos, desde la generación, el transporte, el tratamiento y ahora el tema del aprovechamiento, que es el último eslabón en el que deseamos trabajar”, dijo Tito Calvimontes, gerente de SAGUAPAC.
Desde que el proyecto piloto mostró resultados impresionantes, otros municipios de la región de Santa Cruz, incluidos Cotoca y La Guardia, se sumaron al proyecto. Los alcaldes de esas ciudades han expresado su apoyo a la iniciativa, mencionando preocupaciones en materia de salud pública y la necesidad de ampliar el acceso a los servicios.
“Es parte de la salud, pues, el alcantarillado, el saneamiento básico, las aguas residuales, la contaminación de las aguas superficiales, contaminación de las aguas subterráneas. Si nosotros no cuidamos eso, si nosotros no prevemos, no lo vemos con seriedad, seguro que vamos a ser enfermos siempre. Los niños con seguridad tendrán parásitos, se sentirán enfermos, tendrán dolores de estómago y una sensación general de malestar. Preocuparnos es parte de la salud preventiva", dijo Jorge Morales Encinas, alcalde de la Municipalidad de La Guardia, donde viven 146 208 habitantes.
Wilfredo 'Coco' Añez, alcalde del Municipio de Cotoca, con una población de 56 541 habitantes, considera que la falta de acceso al saneamiento es un problema que debe ser resuelto y tiene grandes expectativas en su gestión administrativa.
“La verdad es que dentro de nuestro municipio tenemos un 15 % de gente con saneamiento básico, con alcantarillado, no es mucho... Nosotros queremos seguir trabajando en el objetivo de tratar de tener un 80 %, un 90 % de nuestros ciudadanos con saneamiento básico", señaló. “Pues entonces esperemos que el Banco Mundial nos siga apoyando a los ciudadanos cotoqueños, cruceños, bolivianos para poder así tener esa meta que todo municipio con seguridad quiere". Raul Alvis Claudio, un miembro del Concejo Municipal de Cotoca, se hizo eco del sentido de urgencia expresado por el alcalde. "En la municipalidad de Cotoca, poca gente tiene servicios de alcantarillado", dijo. "En Cotoca tenemos ahora nosotros ya un plan integral, un plan macro, que lo hemos realizado entre todos, en que el Banco Mundial también nos ha ayudado a nosotros a realizarlo. El próximo paso en el proceso será atraer las inversiones para implementar y llevar a cabo nuestro plan".
Rápidamente se hizo evidente que abordar el problema en estas zonas demandaría diversas soluciones adaptadas exclusivamente a los respectivos entornos urbanos. “Dado que no existe una solución única o simple para el problema del saneamiento urbano, una manera prometedora de encarar esta tarea fue a través de la planificación del saneamiento inclusivo para toda la ciudad (o CWIS)”, dijo Alfonso Alvéstegui, especialista senior en Abastecimiento de Agua y Saneamiento del Banco Mundial, que trabaja en Bolivia. “Desde 2018, comenzamos a trabajar en el desarrollo de enfoques integrales para sistemas centralizados y descentralizados, soluciones para las instalaciones de saneamiento in- situ y los sistemas de alcantarillado en las ciudades, y desafíos institucionales en estas ciudades intermedias”.
Como parte de los esfuerzos, las ciudades intermedias de Cotoca, La Guardia y Montero están elaborando sus propios planes de saneamiento de acuerdo con el enfoque de CWIS. Las proveedoras de servicios de agua y saneamiento (conocidas como Cooperativas de Agua) de estas ciudades ya están cosechando los beneficios.
“El trabajo que realizó el Banco Mundial ha sido muy beneficioso para las cooperativas de aquí del municipio de La Guardia. Ha realizado talleres donde hemos participado, donde nos han explicado profesionales de alto nivel que ellos han contratado cómo hay que cuidar las aguas subterráneas y las superficiales para [prevenir] la contaminación”, dijo Orlando Orosco García, jefe de Operaciones de Agua de La Guardia.
Sin saneamiento seguro no es posible contar con una economía urbana próspera. Garantizar el acceso a los servicios de saneamiento hará que las ciudades sean más seguras y mejorará la salud y el bienestar de los ciudadanos. La prestación segura de los servicios de abastecimiento de agua, saneamiento e higiene (WASH, por sus siglas en inglés) es un elemento esencial para prevenir enfermedades y proteger la salud humana durante brotes infecciosos, como la actual pandemia de COVID-19. Una de las estrategias más eficaces en función del costo para aumentar la preparación para una pandemia, especialmente en entornos con recursos limitados, es invertir en la infraestructura básica de salud pública, incluidos los sistemas de agua y saneamiento. Las prácticas idóneas de WASH y de gestión de desechos, aplicadas de manera continuada, sirven como barreras para la transmisión de la COVID-19 de persona a persona en hogares, comunidades, centros de salud, escuelas y otros espacios públicos.
En colaboración con los Gobiernos nacionales y subnacionales, la entidad reguladora de los servicios de agua y saneamiento, los Gobiernos municipales, las empresas de agua, el sector privado y otros asociados, el Banco Mundial seguirá fortaleciendo el marco institucional y la capacidad para lograr servicios inclusivos en Santa Cruz, así como en otras ciudades bolivianas.