Crisis globales como la pandemia de la Covid 19 han demostrado la relevancia de que los Estados puedan estar más cerca de sus ciudadanos, entregando respuesta integral, oportuna y eficiente ante la creciente demanda de servicios y beneficios sociales.
Chile se dio cuenta a tiempo de esta necesidad y desde el año 2018, el Ministerio de Desarrollo Social y Familia comenzó a trabajar, con el apoyo del Banco Mundial a través una asistencia técnica reembolsable, en el desarrollo de Gestión Social Local (GSL), una nueva metodología para la entrega integrada de servicios y beneficios sociales en los municipios y que posteriormente se extendió a las delegaciones presidenciales regionales y provinciales.
A través de una “ventanilla única”, los funcionarios disponen de los distintos programas y subsidios con que cuenta y a los que puede acceder un beneficiario, permitiendo entregar una mejor atención social, además de aumentar la eficiencia del gasto público.
Protección social centrada en las personas
El sistema integrado de protección social ha permitido a Chile lograr importantes avances en reducción de la pobreza. Las municipalidades a lo largo del país son las encargadas de entregar los beneficios. Para ello, al año 2017 se ejecutaban 3.305 convenios por más de US$81 millones.
“Nos dimos cuenta de que la política social se había implementado a partir de una ultra fragmentación. Tuvimos que hacer la acción reversa de volver a generar una atención sistémica”, afirma Marcia Pardo, responsable de la unidad de Gestión Social Local del Ministerio de Desarrollo Social y Familia de Chile.
Santiago De la Cadena, economista en Desarrollo Humano del Banco Mundial, explica que el sistema cuyo corazón es la unidad municipal de asistencia social, tiene una estructura modular flexible, que permite ir incorporando nuevos programas y prestaciones intersectoriales. “Al integrar los distintos servicios que ofrece el Estado a una persona o familia, se aumenta la eficiencia y eficacia de la política social. Además, mejora su integralidad e integración, a partir de una mejor articulación con la atención en niñez, la atención primaria en salud, el apoyo al empleo y el cuidado del adulto mayor y de personas con discapacidad, permitiendo así al sistema de protección social chileno develar un rostro más humano”, destaca.
Apoyo a la labor de los funcionarios públicos
Más de 6 mil funcionarios públicos de todo Chile ya están utilizando este nuevo modelo de gestión, lo que ha revolucionado la forma en que trabajan, al ayudarles a ser más proactivos, entregar un mejor servicio y atención.
“El sistema GSL nos permite manejar información que antes no teníamos. Podemos lograr cambiar vidas y eso genera una satisfacción fundamental para nosotros”, destaca Hilda Fuentes, funcionaria municipal de la Municipalidad de Renca.
Al utilizar GSL, los funcionarios pueden ahorrar tiempo, ya que disponen de toda la información necesaria para brindar una buena atención a los ciudadanos y derivarlos en forma más oportuna. Así, les facilita su trabajo para que puedan atender mejor y a más personas.
Daniela Fuentes, funcionaria municipal de la Municipalidad de Independencia agrega que, “trabajar con GSL me hace sentir tranquila de que estoy haciendo bien mi trabajo, de que le estoy dando una respuesta concreta a una persona que lo necesita”.