El mal tiempo en América del Sur, los países del Mar Negro, China e India causa preocupación
Ciudad de Washington, 26 de noviembre de 2013. Los precios mundiales de los alimentos disminuyeron un 6% en el último trimestre, pero aún no se han alejado mucho de sus topes históricos, según la última edición del informe Alerta sobre precios de los alimentos del Grupo del Banco Mundial. Los mercados del trigo siguen complicados, y las preocupaciones relacionadas con el clima en Brasil, Paraguay, Argentina, Ucrania y la Federación de Rusia pueden impulsar aún más al alza los precios de este producto en los próximos meses.
Los precios internos mostraron grandes variaciones de un país a otro, atribuibles principalmente a tendencias estacionales, pero también se debieron a una combinación de factores, como el mal tiempo, las políticas de adquisiciones públicas, los déficits de abastecimiento local y las devaluaciones de las monedas.
“La disminución sostenida de los precios se recibe con agrado, tenemos muchos motivos para estar contentos”, dijo Ana Revenga, vicepresidenta interina de la Red sobre Reducción de la Pobreza y Gestión Económica (PREM) del Grupo del Banco Mundial. “Pero estos logros son frágiles. Las constantes inquietudes con respecto a la variabilidad del clima o las fluctuaciones cambiarias nos mantienen lejos de cantar victoria sobre los precios de los alimentos. Debemos seguir prestando mucha atención, ya que estos avances se pueden revertir rápidamente si las preocupaciones se hacen realidad”.
Según la edición más reciente de Alerta sobre precios de los alimentos, el Índice de precios de los alimentos del Banco de octubre de 2013 fue un 12% inferior que hace un año y estuvo un 16% por debajo de la máxima histórica de agosto de 2012. Sin embargo, a pesar de esta disminución, los precios se mantienen cercanos a las cifras más altas registradas.
El aumento de la demanda de trigo -especialmente de China-, un dólar estadounidense más débil y la creciente preocupación debido a los últimos graves fenómenos climáticos han afectado los precios de manera negativa. Inicialmente, los aumentos de precios fueron casi imperceptibles en agosto y septiembre, pero luego aumentaron abruptamente en octubre. Se espera que las existencias mundiales de trigo se recuperen parcialmente de las caídas del año pasado, pero las existencias de cierre de los principales exportadores siguen siendo bajas, lo cual afecta las ya escasas disponibilidades exportables. Las existencias de arroz y maíz, por el contrario, siguen siendo abundantes y se espera que se mantengan así hasta fin de año.
Supergranjas
El informe Alerta sobre precios de los alimentos también analiza el papel que puede desempeñar la agricultura en gran escala, conocida popularmente como “supergranjas”, en el aumento de la productividad agrícola y la reducción de la pobreza. No existe aún un veredicto claro sobre si esta tendencia tiene un efecto positivo o negativo en la promoción de la prosperidad compartida, especialmente en los países donde existen instituciones frágiles y una supervisión deficiente, ya que las inquietudes por el bienestar social, ambiental y animal deben sopesarse con beneficios potencialmente prometedores, como el aumento del empleo y una mayor eficiencia.
Contribución del Grupo del Banco Mundial
El Grupo del Banco Mundial se ha comprometido a impulsar la agricultura y las inversiones relacionadas con este sector, destinando US$8000 millones en 2013. Para el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento y la Asociación Internacional de Fomento (BIRF/AIF), la asistencia a la agricultura y actividades afines aumentó de un promedio del 9% del total de préstamos en los ejercicios 2010-12, al 12% en el ejercicio de 2013.
- La Corporación Financiera Internacional (IFC) otorgó US$4.500 millones en concepto de inversiones del sector privado en la cadena de suministro de alimentos durante el ejercicio de 2013. Estas inversiones respaldaron proyectos que promueven el acceso a financiamiento a insumos como semillas, equipo y asesoría, y el acceso a los mercados a través de infraestructura y plantas de procesamiento de alimentos.
- El Grupo del Banco Mundial respalda el Programa Mundial para la Agricultura y la Seguridad Alimentaria (GAFSP, por sus siglas en inglés). Ocho países y la Fundación Bill y Melinda Gates han comprometido unos US$1300 millones para un periodo de tres años, de los cuales se han recibido US$1100 millones.
- El Programa de Respuesta a la Crisis Mundial de los Alimentos (GFRP, por sus siglas en inglés) ha beneficiado a 66 millones de personas en 49 países mediante ayuda de emergencia por un monto de US$1600 millones. Desde julio de 2012, la ayuda del Banco se canaliza a través del Fondo de Respuesta a las Crisis y el Mecanismo de Respuesta Inmediata, ambos de la AIF.
- Aumento de las asignaciones del BIRF/AIF a redes de protección social. Estas se sextuplicaron, subiendo de US$1200 millones en el periodo anterior a las crisis (ejercicios de 2006-08) a más de US$10 000 millones en los ejercicios de 2009-2012.
- Coordinación con los organismos de las Naciones Unidas (ONU) a través del Equipo de Tareas de Alto Nivel sobre la Crisis Alimentaria Mundial y con organizaciones no gubernamentales, y respaldo a la Alianza para el Sistema de Información de Mercados Agrícolas (AMIS, por sus siglas en inglés), (i) con el objetivo de mejorar la transparencia en los mercados de alimentos.
- Promoción de más inversiones en investigación agrícola –por ejemplo, a través del Grupo Consultivo sobre Investigaciones Agrícolas Internacionales (CGIAR, por sus siglas en inglés)– (i) y seguimiento del comercio para identificar cualquier posible escasez de alimentos.
- Apoyo al mejoramiento de la nutrición entre grupos vulnerables. Durante la última década (2003-2013), la AIF -el fondo del Banco Mundial para los más pobres-, ha garantizado que más de 210 millones de embarazadas/madres que amamantan, niñas adolescentes, y/o niños menores de 5 años recibieran servicios básicos de nutrición. El Banco es además miembro activo del movimiento mundial para el fomento de la nutrición (SUN, por sus siglas en inglés) (i) y respalda la plataforma de conocimientos SecureNutrition (https://www.securenutritionplatform.org/), (i) que tiene como propósito mejorar la nutrición a través de inversiones en la agricultura.
- IFC está poniendo en marcha el Programa Mundial de Riego (GIP, por sus siglas en inglés), que da respaldo a los proveedores de riego con el fin de aumentar la disponibilidad y el acceso de equipos eficientes para mejorar la gestión del uso del agua destinada a la agricultura.