CIUDAD DE WASHINGTON, 1 de diciembre de 2017. Las iniciativas mundiales dirigidas a mejorar las oportunidades de educación para todos están dejando atrás a los niños con discapacidad, y las brechas entre los niños con discapacidad y aquellos sin discapacidad se han incrementado notablemente en los países en desarrollo, según una nueva investigación del Banco Mundial y la Alianza Mundial para la Educación (AME) dada a conocer en vísperas del Día Internacional de las Personas con Discapacidad.
El estudio titulado Disability Gaps in Educational Attainment and Literacy (La discapacidad y las brechas en los niveles de instrucción y alfabetización) reveló que la tasa de finalización de la primaria entre los niños con discapacidad en 19 países en desarrollo* solo llega al 48 %, y que tres de cada 10 niños con discapacidad jamás han asistido a la escuela. El estudio está basado en el análisis de datos censales y reveló, asimismo, que las tasas de alfabetización y de finalización de la secundaria están muy rezagadas: solo seis de cada 10 niños con discapacidad sabe leer y escribir, y apenas un tercio termina la educación secundaria.
“Garantizar que todos los niños tengan las mismas oportunidades de asistir a la escuela y aprender debería ser la primera prioridad para poner fin a la continua crisis de aprendizaje. La discapacidad —más que el género o el estatus socioeconómico— tiene un impacto enorme en las oportunidades de aprendizaje de los niños”, dijo Quentin Wodon, economista principal del Banco Mundial y coautor del estudio. “A medida que trabajamos con los países para invertir cada vez más en su gente, es fundamental que no dejemos atrás a los niños con discapacidad”.
Las brechas entre los niños con discapacidad y aquellos sin discapacidad se han incrementado considerablemente en los últimos 30 a 40 años. En gran medida, los niños con discapacidad han sido excluidos de las iniciativas orientadas a mejorar los resultados educativos en el mundo en desarrollo. Por ejemplo, a pesar de la alta tasa de matriculación en la educación primaria que existe en muchos de los países incluidos en el informe, la brecha en la tasa de finalización de la primaria entre ambos grupos es de 15 puntos porcentuales en el caso de las niñas y de 18 puntos porcentuales en el de los niños.
En el informe se demuestra que estas brechas son consecuencia de la exclusión asociada con la discapacidad, a diferencia de otras características de los niños que podrían correlacionarse con la discapacidad. Además, el informe revela que los niños con discapacidad intelectual o con múltiples discapacidades tienden a estar en peor situación que los niños con discapacidad física o discapacidades relacionadas con la audición, la vista o el habla. Según los expertos, el acceso de los niños con discapacidad a las escuelas a menudo se ve limitado por una falta de comprensión acerca de sus necesidades, la escasez de docentes capacitados, así como por la falta de instalaciones adecuadas, de apoyo en la sala de clases y de recursos de aprendizaje.
“Cuando los niños con discapacidad pueden ejercer su derecho a la educación, ello tiene un efecto positivo para toda la vida —en su aprendizaje, sus logros y sus oportunidades de empleo— y contribuye a su desarrollo personal y al desarrollo económico, social y humano de sus comunidades y países”, dijo Louise Banham, asesora superior en educación de la AME. “La AME está trabajando en estrecha colaboración con sus socios para promover la inclusión de los niños con discapacidad en los sistemas educativos”.
Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) propugnan una educación de calidad, inclusiva y equitativa para asegurar que las personas vulnerables, incluidos los niños con discapacidad, tengan acceso igualitario a todos los niveles de educación. Los ODS abogan por la construcción y modernización de los establecimientos educacionales de tal forma que se tengan en cuenta las necesidades de los niños —por ejemplo, en lo que se refiere a la discapacidad y el género— y que se proporcione un ambiente seguro, inclusivo y propicio para el aprendizaje.
Como parte de sus esfuerzos por promover la educación inclusiva y garantizar que todos los niños tengan la oportunidad de prosperar en la vida, el Banco Mundial está trabajando para diseñar e implementar estrategias de educación inclusiva, financiar proyectos y brindar asesoría en varios países: China, India, Malawi, Moldova, Túnez y Vietnam.
La AME también proporciona financiamiento y orientación a los países en desarrollo para elaborar e implementar planes sólidos en el sector de educación que incluyan estrategias para cerrar la brecha entre acceso, participación y aprendizaje, a fin de garantizar que los niños con discapacidad puedan asistir a la escuela y aprender.
*Los 19 países incluidos en el informe son: Bangladesh, Burkina Faso, Camboya, Costa Rica, Etiopía, Ghana, Indonesia, Kenya, Liberia, Malí, Malawi, México, Mozambique, Perú, República Dominicana, Sudáfrica, Sudán del Sur, Vietnam y Zambia.
Para obtener más información, visite:
Alianza Mundial para la Educación