Dos nuevos proyectos apoyan el nuevo Plan Nacional de Desarrollo de la Primera Infancia, en coordinación con instituciones públicas y socios internacionales de desarrollo
WASHINGTON, D.C., 19 de marzo de 2020 – El Directorio Ejecutivo del Banco Mundial aprobó hoy dos proyectos por un total de US$500 millones en El Salvador, dirigidos a fortalecer la calidad y disponibilidad de servicios de educación y salud para niños desde el periodo de gestación hasta los 7 años.
Ambos proyectos son parte del apoyo del Banco Mundial al nuevo Plan Nacional de la Primera Infancia que lleva adelante el gobierno salvadoreño y fueron diseñados para complementarse y coordinar intervenciones en áreas clave.
Esto incluye el desarrollo de estándares de calidad educativa, de cuidado y de salud de los menores; la producción de materiales de aprendizaje para niños, padres y cuidadores; capacitación para personal; implementación de un sistema de gestión e información para la interoperabilidad entre ministerios, y la provisión y monitoreo de servicios de nutrición en centros para la primera infancia.
“La niñez es la base del crecimiento del país y con el Plan Nacional de Primera Infancia, que involucra y articula el trabajo de muchas instituciones públicas en El Salvador, vamos a cambiar las condiciones de educación, atención y salud de todos los niños, para romper ciclos de pobreza y fomentar mejores resultados para su futuro”, dijo Gabriela Rodríguez de Bukele, Primera Dama de la República de El Salvador.
El proyecto “Crecer y aprender juntos: desarrollo integral de la primera infancia”, de US$250 millones, busca mejorar la calidad de la enseñanza y la atención a la primera infancia en todo el país, optimizar las instalaciones y entornos de aprendizaje en centros públicos de educación y cuidado de los niños, y fortalecer las capacidades institucionales para la gestión del sector educativo.
Más de 230 mil menores y sus familias se verán beneficiadas por esta iniciativa, que será implementada por el Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología (MINEDUCYT). Las actividades incluyen:
· asegurar e implementar estándares nacionales de calidad, acreditaciones y un currículo base para la educación y atención de la primera infancia en instituciones públicas y privadas en el país,
· fortalecer las capacidades profesionales de 7.800 docentes y 4.500 directivos del sector público en centros de primera infancia en zonas urbanas y rurales, y
· obras de infraestructura en 110 centros públicos de educación de la primera infancia y mantenimiento correctivo y/o equipamiento para mejorar las instalaciones de otros 400 centros públicos.
Por su parte, el proyecto “Crecer sanos juntos: desarrollo integral de la primera infancia”, también de US$250 millones, tiene como objetivo fomentar mejores comportamientos para promover la salud de los niños de 0 a 7 años y de sus madres antes de la concepción y durante la gestación. También, fortalecer la identificación temprana de riesgos y retrasos en el desarrollo de los menores y mejorar la provisión de servicios para una salud materno-infantil de calidad, incluyendo la capacitación de trabajadores de la salud.
El proyecto será implementado por el Ministerio de Salud (MINSAL) e incluye actividades como:
· fortalecer la red nacional de servicios para la atención a mujeres antes de la concepción, durante la gestación y para un parto seguro, incluyendo rehabilitación de instalaciones, desarrollo de clubes de conocimiento para futuras madres y la compra y el mantenimiento de suministros y equipos para atención prenatal y del parto,
· promover la salud en niños desde su nacimiento y hasta los 3 años, lo que incluye mejorar la calidad de los servicios de salud, comunicación para la promoción de la salud materno-infantil y la prevención de enfermedades; provisión de kits informativos para la estimulación apropiada en la primera infancia, mejorar la detección temprana de retrasos en el desarrollo y armonizar los estándares de atención, y
· esfuerzos multisectoriales para proveer servicios esenciales para niños de 4 a 7 años, incluyendo el monitoreo de entornos de aprendizaje para asegurar que sean saludables y el monitoreo de provisión de alimentos nutricionales y alimentación suplementaria.
“Los primeros años de vida de cada niño son una oportunidad única para ayudarlo a desarrollar su potencial y mejorar sus perspectivas de prosperidad. Por eso, invertir en la primera infancia es lo correcto, pero también es lo más inteligente desde el punto de vista económico, para beneficiar desde ahora a los niños, sus familias, sus comunidades y al país”, dijo Oscar Avalle, gerente de país del Banco Mundial en El Salvador.
Además de estos dos proyectos y la asistencia técnica del Banco Mundial, el nuevo Plan Nacional de Primera Infancia de El Salvador cuenta con el apoyo de un proyecto de inversión en educación del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la asistencia técnica del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).
El préstamo de US$250 millones para el proyecto “Crecer y aprender juntos: desarrollo integral de la primera infancia” y el préstamo de US$250 millones para el proyecto “Crecer sanos juntos: desarrollo integral de la primera infancia” tienen un vencimiento final de 25 años, con un período de gracia de 5 años.
Obtenga más información sobre el trabajo del Banco Mundial en América Latina y el Caribe.
Para conocer el trabajo del Banco Mundial en El Salvador visite el sitio web de país.
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