WASHINGTON, 1 de abril de 2024. El Directorio Ejecutivo del Banco Mundial aprobó el pasado jueves un nuevo proyecto para apoyar a Colombia en su transición hacia un modelo de desarrollo sostenible, resiliente y bajo en carbono. El proyecto promoverá políticas y reformas que fortalezcan la capacidad institucional del gobierno para transformar sectores clave como el de energía, transporte y agricultura.
Colombia enfrenta una alta exposición a los riesgos climáticos, con impactos en su crecimiento económico y la lucha contra la pobreza. Las inundaciones y deslizamientos de tierra son los efectos de cambio climático más prevalentes en el país; en los últimos años, su frecuencia se ha más que duplicado y ha ocasionado interrupciones en el acceso a servicios básicos, la conectividad vial, la educación y la atención médica, con un impacto directo en el crecimiento económico, la productividad y el bienestar de la población.
Además, el aumento de las temperaturas y los cambios en los patrones de precipitación han generado una disminución en la disponibilidad de agua, lo que a su vez reducido la productividad agrícola y ha intensificado la vulnerabilidad ante las sequías. Frente a este panorama, es importante para Colombia emprender la transición hacia una economía más resiliente, con bajas emisiones de carbono y un enfoque en el manejo sostenible de los recursos naturales.“La operación propuesta refleja el firme compromiso de Colombia en afrontar los retos climáticos y avanzar hacia una economía más respetuosa con el medio ambiente. Se prioriza la adopción de fuentes de energía más sostenibles y la implementación de medidas para preservar el clima, con el objetivo de promover el desarrollo y el bienestar de todos los ciudadanos colombianos", dijo Mark Thomas, director del Banco Mundial para Colombia, México y Venezuela. "Estas acciones demuestran el compromiso activo del país hacia un futuro más prometedor para su población, donde la sostenibilidad ambiental y la prosperidad económica van de la mano", sostuvo.
Para respaldar el país en este proceso, el proyecto del Banco Mundial, por US$ 750 millones, apoyará a Colombia a través de cuatro pilares principales. El primer pilar promueve reformas para avanzar en la transición energética baja en carbono, especialmente en los sistemas de transporte y energía. Se buscará impulsar el desarrollo de la energía solar, eólica marina y el hidrógeno verde, así como avanzar con la electrificación del transporte urbano, el apoyo a los sistemas de transporte público y la expansión del transporte multimodal.
El segundo pilar del proyecto respaldará los esfuerzos hacia un uso más sostenible de la tierra y uno más eficiente del agua. Se enfocará en empoderar a las comunidades campesinas para mejorar la administración de tierras y la productividad agrícola, al mismo tiempo se protegen los ecosistemas vitales.
El tercer pilar buscará construir resiliencia y adaptación al cambio climático incluyendo la identificación y reducción de riesgos, así como la preparación, respuesta y recuperación ante emergencias. Por su parte, el cuarto pilar contribuirá a crear un vehículo financiero más eficiente para facilitar el acceso a fondos para la acción climática, fortaleciendo el marco de financiamiento climático.
El préstamo es el segundo de una serie de dos proyectos para acelerar la acción climática en Colombia, y están alineados con el Plan Nacional de Desarrollo de Colombia para 2022-2026, el nuevo Marco de Alianza con el País del Banco Mundial para el período 2024-2027 y con las recomendaciones del Informe sobre clima y desarrollo para Colombia.
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