Este discurso deberá ser cotejado con el audio de la ponencia
Para el Banco Mundial, el pluralismo, la diversidad de voces en el espacio mediático, la más irrestricta libertad de prensa, la libre circulación de ideas, el acceso a la información, la rendición de cuentas a la ciudadanía, son todos valores esenciales de la institucionalidad democrática y por ende un aspecto clave para el desarrollo con inclusión de la ciudadanía.
- Señor Presidente de la República, Enrique Peña Nieto,
- Señor Secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza,
- Señor Secretario de Educación Pública, Emilio Chuayffet Chemor,
- Demás autoridades,
- señoras y señores,
Me da mucho gusto estar con ustedes y ser parte de este Quinto Foro de Medios Públicos aquí en mi propio país donde, de un tiempo a esta parte, se han venido registrando importantes transformaciones registradas este sector.
Nuestra institución produjo, hace más de diez años, un emblemático estudio, “El derecho a hablar” o por su título en inglés, “The Right to tell”. En este estudio, se ponía de manifiesto que una estructura de medios de comunicación plural, con medios independientes, ensancha la libertad de prensa y contribuye a que los actores de la sociedad y aquellos que operan en el mercado tomen decisiones que favorecen el desarrollo humano.
En nuestra región y en particular en la última década, se ha logrado combinar exitosamente la puesta en práctica de unas políticas macro económicas y financieras sólidas junto a políticas de inclusión en el terreno social.
El resultado ha sido tangible. La pobreza extrema y la pobreza moderada se redujeron en cerca del 50%. En tanto y por primera vez en la historia moderna de la región, la clase media han llegado a constituir el 34% de la población, superando como grupo a quienes viven en la pobreza.
La inclusión ha sido, entonces, una parte fundamental de este exitoso proceso, y aquí estoy hablando de inclusión en un sentido amplio.
Es que la pobreza no se debe a la falta de recursos materiales exclusivamente. Tiene que ver también con la falta de oportunidades para participar en el proceso de tomas de decisiones sobre el futuro de nuestras sociedades, de nuestro futuro y el de nuestros hijos. La pobreza es multidimensional y tiene que ver, en última instancia, con la resignación a no poder alcanzar el sueño de una vida mejor.
Durante mucho tiempo las oportunidades no han sido para todos en América Latina, sino para algunos: el estrato socio-económico en el que uno nace, el color de la piel, o incluso el género han venido por delante de la equidad. Donde uno nace, determina el resto de la vida futura y esto no es aceptable. Pero afortunadamente, esto está cambiando y no por casualidad sino por las políticas que se han puesto en práctica, en la mayoría de nuestros países.
Al ampliarse las oportunidades de participación en el terreno económico y social, la ciudadanía busca el acceso a los servicios básicos que puedan hacer sustentable los recientes éxitos. Sean servicios de educación, salud o seguridad ciudadana. A su vez, la ciudadanía busca también expresarse públicamente, ya sea de forma organizada o individual, utilizando toda la tecnología que el mundo de hoy pone a su alcance.
Este proceso de ampliación de la libertad de expresión que abre el espacio a cada vez más actores de la comunicación, se ha venido desarrollado al amparo de las nuevas tecnologías de la información, el internet y la digitalización de la Televisión terrestre y no podrá ser frenado por algunas estructuras privadas o estatales que pertenecen al pasado.
De hecho, los países de la región han venido adoptando reformas de sus estructuras mediáticas y de comunicación en la búsqueda de adaptarlas a los tiempos que corren y lo han hecho de acuerdo a sus circunstancias específicas, con sus propios mecanismos de regulación y auto regulación.
Pero más allá de las diferencias, lo que importa es que dichas reformas contribuyan a ensanchar la más irrestricta libertad de prensa; que contribuyan a la pluralidad de voces, al respeto del derecho de expresión, y a la convivencia regulada de forma independiente de los medios privados, públicos y comunitarios o de la sociedad civil.
Nosotros propugnamos un debate abierto e incluyente, y por ello en distintas oportunidades y con socios nacionales e internacionales, hemos convocado a todos los que activamente son parte de este proceso sin más animo que el de facilitar la búsqueda de consensos.
Este Quinto Foro, que es la continuación de los debates celebrados desde 2011 en Uruguay, Paraguay, El Salvador y Brasil con el auspicio de los respectivos gobiernos y de los medios públicos de dichos países, hará énfasis en cómo fortalecer la independencia de gestión de los medios públicos. Hará énfasis en cómo pueden evolucionar para adaptarse a los tiempos de hoy, respondiendo a toda la sociedad y al interés público.
Y en esto tampoco hay un modelo único. En todo caso diferentes abordajes de los cuales mucho se puede aprender en todo los sentidos.
Por nuestra parte, nosotros hemos venido apoyando las experiencias de modernización del espacio público mediático en la Televisión y Radio públicas de El Salvador; en el surgimiento del primer canal de Televisión Pública en Paraguay a través de donaciones y asistencia técnica y en el Perú a través de la Dirección de Comunicaciones de la Presidencia contribuimos al establecimiento de una estrategia integral de comunicación para apoyar los programas de inclusión social.
Por su parte, en Brasil, hemos trabajado junto a la Empresa Brasilera de Comunicación (la EBC) en una iniciativa piloto que se ha convertido en un modelo regional e internacional de como brindarle acceso a las poblaciones más humildes a la Televisión digital interactiva por internet para que, entre otras cosas, puedan acceder al instante a servicios financieros, empleo, servicios de salud, educación, etc.
Señoras y señores, me gustaría concluir agradeciendo una vez más a nuestros amigos de Canal 11 y a las autoridades de México, por su hospitalidad y por su liderazgo en estos temas.
A los invitados internacionales y quienes nos acompañan desde distintas partes de México y del resto de Latino América, nuestro reconocimiento por vincularse a este esfuerzo regional que busca generar un espacio mediático plural para todos.
MUCHAS GRACIAS