El Grupo Banco Mundial mantiene su compromiso de hacer todo lo posible para ayudar a poner fin a la pandemia de COVID-19. Estamos trabajando con más de 100 países de ingreso bajo y mediano para reforzar sus sistemas de salud y promover una respuesta a la pandemia en gran escala, al tiempo que sentamos las bases para la recuperación.
Consideramos que es importante corregir la información errónea que se publicó recientemente en medios sociales sobre las etiquetas de los datos contenidos en la base de datos de la Solución Comercial Integrada Mundial (WITS). Esta herramienta —una iniciativa conjunta del Banco Mundial, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), la División de Estadística de las Naciones Unidas (UNSD), la Organización Mundial del Comercio (OMC) y otros— se utiliza para hacer el seguimiento de una variedad de datos del comercio internacional de mercancías por producto a través de códigos del Sistema Armonizado de Designación y Codificación de Mercancías (i).
Antes del brote de COVID-19, muchos productos destinados a la salud —que se venían monitoreando en la WITS durante años— se etiquetaban con términos técnicos. Por ejemplo, los productos utilizados para las pruebas médicas se incluían en la base de datos con etiquetas tales como “Reactivos; reactivos de diagnóstico o de laboratorio sobre cualquier soporte y reactivos de diagnóstico o de laboratorio preparados, incluso sobre soporte, excepto los de las partidas 3002 o 3006”. Cuando se desarrollaron los kits de pruebas de la COVID-19 en enero de 2020, las autoridades de aduanas los etiquetaron utilizando estas clasificaciones históricas.
En marzo de 2020, dada la creciente importancia de estos productos para diagnosticar y tratar la enfermedad, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Mundial de Aduanas (OMA) emitieron una lista (i) de los principales productos relativos a la COVID-19 para facilitar su seguimiento. También asignaron a estos productos descripciones o etiquetas menos técnicas, como “equipos de pruebas (test) de la COVID-19”. Esta lista incluía una amplia variedad de suministros médicos ya existentes, incluidos los respiradores y los desinfectantes de manos.
Por el mismo motivo —para facilitar el seguimiento—, el equipo de la WITS creó una base de datos especial utilizando la lista de la OMA (junto con las nuevas etiquetas y descripciones de la OMS y la OMA). El objetivo era poner la información sobre suministros médicos clave para la COVID-19 en un lugar fácil de encontrar.
Sin embargo, en vista de las interpretaciones erróneas que se han producido en los últimos días, las etiquetas del sitio de la WITS se han actualizado para reflejar la realidad: las pruebas de COVID-19 no existían antes de 2020. Lo que hace pocos días atrás se denominaba en la WITS como “COVID-19 Test Kit” (equipo de pruebas [test] de la COVID-19) (utilizando la etiqueta de la OMA), ahora se etiquetó correctamente en la sección de COVID como “Medical Tests” (pruebas médicas). También se realizaron ajustes de clarificación en otras partes del sitio web. No obstante, la base de datos principal mantiene las descripciones y etiquetas técnicas originales que existían antes del brote de COVID-19.
Desde el comienzo de la crisis, el Grupo Banco Mundial ha adoptado medidas amplias y rápidas para ayudar a los países en desarrollo a reforzar su respuesta a la pandemia y sus sistemas de atención de la salud. Ya estamos proporcionando apoyo urgente a países que corresponden al 70 % de la población mundial. Estamos trabajando en proyectos de gran escala e impacto, ayudando a los países a implementar operaciones de emergencia en el ámbito de la salud, proteger a los hogares más pobres, y resguardar empleos y empresas.
