Resumen:
La transformación digital de Colombia está en marcha, con el 63 % de la población usando Internet, comparado con el 38 % en 2014. Más de la mitad de los colombianos de 15 o más años han realizado o recibido pagos digitales, comparado con el 37 % en 2017, un incremento sustancial. Colombia ha emergido como un jugador líder en el panorama digital de América Latina y el Caribe (ALC), albergando el 12,8 por ciento de las empresas digitales de la región. Sin embargo, este progreso conlleva nuevos desafíos. Garantizar el acceso universal a Internet y fomentar las habilidades digitales son retos que afrontar para cerrar la brecha entre las zonas urbanas y rurales. Mejorar el acceso puede ayudar a abordar los desafíos del desarrollo, como la desigualdad y el crecimiento lento de la productividad. Un nuevo Diagnóstico de País para Colombia bajo la iniciativa Economía Digital para América Latina y el Caribe (DE4LAC) del Grupo del Banco Mundial analiza el estado actual de la transición del país hacia una economía digital.
Retos principales:
- El desigual acceso a las tecnologías digitales, con bajo acceso en zonas rurales y en ciertos departamentos. El acceso a Internet sigue siendo bajo, especialmente en las zonas rurales, con más del 40 % de los hogares en todo el país, incluyendo casi el 70 % de los hogares rurales, sin Internet.
- Bajas habilidades digitales entre la población que resulta en un uso poco sofisticado del internet. En 2019, Colombia ocupó el puesto 94 de 141 en el Índice de Habilidades Digitales del Foro Económico Mundial. El acceso limitado a Internet y los bajos niveles de capacidades digitales también afectan la capacidad del sector privado para generar valor agregado a través de la adopción de tecnologías digitales. Menos del 20 por ciento de las exportaciones colombianas incluyen algún nivel de tecnología en comparación con alrededor del 80 por ciento de las exportaciones en México.
- El acceso limitado a Internet y las bajas capacidades digitales restringen la capacidad del sector privado para generar valor. El financiamiento de la deuda a través de bancos privados representa menos del 2 por ciento de las inversiones de las empresas de TIC en actividades de ciencia, tecnología e innovación. El limitado crecimiento del mercado de capitales restringe la capacidad de las empresas digitales colombianas para atraer inversiones privadas más diversas y escalables. Los servicios financieros digitales pueden reducir los gastos de financiación de las micro, pequeñas y medianas empresas y promover pagos más ágiles y convenientes, un componente crítico del comercio electrónico y los modelos comerciales basados en plataformas.
- La brecha digital sigue representando un desafío crítico para el desarrollo de una economía digital equitativa y resiliente. Entre los desafíos principales se encuentra la alta proporción de jóvenes que no asisten a la escuela ni trabajan, el desempeño bajo del sistema educativo en la enseñanza de habilidades esenciales, disparidades significativas en las oportunidades educativas basadas en el estatus socioeconómico y el acceso desigual a los recursos digitales y la tecnología en toda la región.
Recomendaciones:
El informe sugiere seis prioridades políticas que el gobierno colombiano podría seguir para mejorar el desarrollo de una economía digital.
- Infraestructura digital: Desarrollar infraestructura digital de alta calidad fomentando la competencia para hacer asegurar la asequibilidad del Internet de alta velocidad, cofinanciando infraestructura en áreas desatendidas y liberando espectro para acelerar el desarrollo de 5G.
- Plataformas públicas digitales: Mejorar los sistemas gubernamentales fortaleciendo la interoperabilidad de los sistemas, implementando el marco de gobernanza y estableciendo un modelo de gestión de datos bien diseñado.
- Servicios financieros digitales: Acelerar la expansión de los servicios financieros digitales fomentando sistemas de pago rápidos e interoperables, implementando finanzas abiertas y aprovechando los pagos digitales de gobierno a persona.
- Negocios digitales: Respaldar los negocios basados en plataformas y el comercio digital al permitir el desarrollo de mercados de capital, diseñar líneas de crédito específicas y fortalecer la infraestructura financiera.
- Habilidades digitales: Definir una estrategia y un marco nacional a través de la evaluación de las habilidades digitales más demandadas e integrándolas en el currículo nacional.
- Entorno de confianza: Fortalecer la protección de datos personales y la infraestructura crítica integrando mejores prácticas, asegurando que los activos críticos del sector privado estén protegidos y desarrollando capital humano en ciberseguridad.