Compromiso del Grupo Banco Mundial

Como parte del Programa Global de Desafíos sobre Bosques para el Desarrollo, el Clima y la Biodiversidad del Banco Mundial, Amazonía Viva promoverá soluciones innovadoras para profundizar y ampliar el apoyo del Grupo Banco Mundial, incluida la Corporación Financiera Internacional (IFC, por sus siglas en inglés) y el Organismo Multilateral de Garantía de Inversiones (MIGA, por sus siglas en inglés), trabajando en alianza con el Grupo Banco Interamericano de Desarrollo bajo el marco del programa Amazonía Siempre.

Amazonía Viva impulsará las inversiones públicas y privadas para lograr un mayor impacto a través de financiamiento gubernamental, préstamos, subvenciones, financiamiento REDD+ (Reducción de Emisiones por Deforestación y Degradación de Bosques), garantías e inversiones del sector privado.

Amazonía Viva se basa en proyectos en los países con acción en tres pilares:

Una Amazonía verde para proteger los activos naturales generando un bioma forestal saludable: se trata de apoyar la preservación del bosque en pie, la protección de los territorios y las tierras indígenas, la planificación territorial, el mantenimiento de la conectividad ecológica, el saneamiento de los ríos, la restauración forestal y la biodiversidad.

Una Amazonía próspera que fomente oportunidades económicas inclusivas e inteligentes para la naturaleza: incluye el apoyo a las cadenas de valor de la bioeconomía, a la agricultura verde e inclusiva, a los pagos por servicios ambientales, a la trazabilidad, al acceso a la financiación, a los mercados de carbono, a los medios de vida sostenibles, a los empleos urbanos sostenibles y al fortalecimiento de los derechos de propiedad.

Una Amazonía habitable para mejorar los niveles de vida de su población: se trata de ampliar el acceso a la salud, a la educación, a los servicios de protección social, y mejorar la calidad del agua, la conectividad digital, fomentar la energía limpia, la electricidad rural, las inversiones en infraestructura básica y las ciudades sostenibles y resilientes.

Del compromiso a la acción

Estos son los últimos avances en el marco de la iniciativa Amazonía Viva:

En el marco de la iniciativa Amazonía Viva, el Banco Mundial, organizaciones de Pueblos Indígenas de la Amazonía peruana (AIDESEP, ANECAP, CONAP, ONAMIAP) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) se reunieron en Lima, Perú, el 8 de mayo de 2024, para establecer áreas de colaboración en la promoción del desarrollo sostenible en la Amazonía.

La discusión se centró en el acceso al financiamiento directo a las organizaciones de Pueblos Indígenas, apoyándolas con asistencia técnica en temas administrativos, financieros y fiduciarios, y la incorporación del conocimiento y la cultura tradicional en los programas, entre otros temas. 

Además, se estableció una hoja de ruta para identificar acciones y compromisos conjuntos, incluyendo una mesa redonda periódica entre el Banco Mundial, organizaciones de Pueblos Indígenas de la Amazonía y otras organizaciones internacionales, así como una propuesta para fortalecer la capacidad dentro de las organizaciones, con un enfoque especial en la juventud. 

En abril de 2024, la Organización Nacional de los Pueblos Indígenas de la Amazonía Colombiana (OPIAC), la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) y el Banco Mundial se reunieron en Leticia para establecer una plataforma de diálogo. El equipo del Banco Mundial visitó también los Lagos de Tarapoto, un humedal protegido por el proyecto "Corazón de la Amazonía", y presentó el Informe sobre el Clima y el Desarrollo de Colombia en un think tank local.  

Durante este encuentro, las Organizaciones Indígenas y el Banco Mundial acordaron cooperar para fortalecer el desarrollo territorial y la gobernanza indígena.

Como seguimiento a este acuerdo, en mayo de 2024, el Banco Mundial se reunió con la Mesa Permanente de Concertación Indígena (MPC), la plataforma de diálogo entre el gobierno colombiano y el movimiento indígena. Esta colaboración se expandió a nivel nacional, dando lugar a la búsqueda de mecanismos innovadores de financiamiento directo. Asimismo, se desarrollaron talleres varios para fortalecer su gobernanza y autonomía (por ejemplo, de financiamiento verde).

Hoy, el Grupo Banco Mundial y la MPC cuentan con una hoja de ruta que coloca las visiones y aspiraciones de los Pueblos Indígenas en el centro de la agenda de desarrollo.

Durante la sesión número 23 del Foro Permanente de las Naciones Unidas para las Cuestiones Indígenas (UNPFII) en la ciudad de Nueva York en abril de 2024, las organizaciones de Pueblos Indígenas de la Amazonía de Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú y Surinam, y el Banco Mundial exploraron sinergias dentro de sus visiones colectivas para la región. Conversaron sobre la necesidad de salvaguardas y protocolos que posicionen a los Pueblos Indígenas como agentes de cambio.   

El Banco Mundial compartió su nueva visión, Amazonía Viva, subrayando su compromiso de apoyar a los Pueblos Indígenas, los afrodescendientes y las comunidades locales en su papel crucial de proteger los bosques. Las organizaciones participantes destacaron la importancia de aumentar la participación de las mujeres y los jóvenes y ampliar las iniciativas lideradas por las organizaciones de Pueblos Indígenas, en particular en materia de financiamiento climático, mercados de carbono y cooperación transfronteriza.

Más de 100 representantes y expertos de siete países amazónicos participaron en un taller brindado por el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en Bogotá, Colombia, en mayo de 2024, sobre los créditos de carbono forestales de alta integridad y las condiciones propicias necesarias para su éxito. 

Durante el taller, los participantes discutieron los componentes básicos de los créditos de carbono de alta integridad (ambiental, social, de mercado financiero), los vínculos entre la biodiversidad y la acreditación de carbono, y las condiciones para acceder a los mercados de carbono. 

Con los objetivos renovados expresados en la Declaración de Belém, el Banco Mundial está apoyando a la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA), el órgano de coordinación intergubernamental de los ocho países amazónicos, para fortalecer sus procesos de gestión e implementar nuevas herramientas de datos para monitorear las condiciones ambientales y sociales. 

El 26 de junio de 2024, en una conversación con organizaciones filantrópicas y empresariales, se exploraron formas de cómo los actores públicos y privados pueden ofrecer financiación en condiciones concesionales y otros mecanismos financieros para que los Pueblos Indígenas puedan amplificar su impacto.