Los gobiernos de América Latina y el Caribe enfrentan desafíos significativos de desarrollo, incluyendo un crecimiento económico insuficiente, inflación y debilidades institucionales. Superar estos problemas requiere identificar obstáculos a través de diagnósticos basados en datos y equipar a los funcionarios públicos con las habilidades para implementar soluciones efectivas.
Aunque las administraciones públicas en la región a menudo tienen acceso a datos valiosos, frecuentemente no logran analizarlos para tomar decisiones informadas. El impacto es grande. Las ineficiencias en la contratación, las transferencias mal dirigidas y la mala gestión de los recursos humanos resultan en un desperdicio estimado del 4% del PIB, equivalente al 17% de todo el gasto público.
El informe "Datos para una Mejor Gobernanza: construyendo ccosistemas analíticos gubernamentales en América Latina y el Caribe" describe una hoja de ruta para desarrollar análisis gubernamentales, enfocándose en habilitadores clave como la infraestructura de datos y la capacidad analítica, y ofrece estrategias para mejorar.
Mensajes Clave
1. Ampliar el uso de analísis gubernamental en América Latina y el Caribe
Las administraciones públicas en la región utilizan los datos principalmente para producir análisis descriptivos con fines operativos y transaccionales. Con este enfoque se pierden oportunidades de aprovechar análisis avanzados para la toma de decisiones y el diseño de mejores políticas públicas.
- La región es líder mundial en la adopción de sistemas de información de gestión (SIG). Para 2022, todos los países tenían tanto un Sistema de Información de Gestión de Finanzas Públicas como un Sistema de Información de Gestión Tributaria. Además, el 91% tenía un Sistema de Información de Gestión de Recursos Humanos y el 84% tenía un sistema de contratación electrónica.
- Estos sistemas generan vastos reservorios de datos administrativos, ofreciendo un potencial significativo no explotado. Sin embargo, el 96% de los SIG en la región se utilizan exclusivamente para análisis descriptivos, una tendencia observada en todas las funciones gubernamentales encuestadas.
- Los análisis avanzados pueden transformar el desempeño del sector público. Por ejemplo, Ecuador y Perú aumentaron significativamente los ingresos fiscales a través del análisis de datos transaccionales, mientras que Guatemala redujo las tasas de deserción escolar en un 9% utilizando análisis de datos de los estudiantes.
2. Crear las condiciones para un análisis gubernamental efectivo
Para aprovechar plenamente el poder de los datos, los gobiernos deben completar la digitalización de sus sistemas de información de gestión.
- Dos tercios de los expertos encuestados informan que estos sistemas siguen parcialmente digitalizados, limitando su efectividad.
- Los mecanismos para asegurar la calidad e integración de los datos son esenciales. Sin embargo, según el Índice de Madurez GovTech del Banco Mundial, solo el 25% de los países en la región han implementado un marco de calidad de datos. Sin estos controles, los equipos realizan sus propias verificaciones de calidad, creando ineficiencias y comprometiendo la precisión de los análisis.
3. Integrar el análisis de datos en los procesos de toma de decisiones
Los análisis deben servir como una herramienta para complementar la formulación de políticas, no para reemplazarla. Desarrollar la capacidad de los funcionarios para interpretar y actuar sobre la evidencia basada en datos es esencial para una gobernanza efectiva.
- Los gobiernos deben priorizar la atracción y retención de analistas de datos capacitados. Sin embargo, solo el 12% de las administraciones públicas en la región ofrecen una carrera dedicada a estos profesionales.
América Latina y el Caribe, y el mundo, ya poseen los datos necesarios para revolucionar la gestión pública. Ahora es el momento de capitalizar este potencial fortaleciendo las capacidades analíticas, integrando las ideas en la formulación de políticas y fomentando una cultura de gobernanza basada en la evidencia.