Desafío
En 2007, el sector de la educación de Nigeria estaba administrado por las autoridades federales, estatales y locales y se caracterizaba por la fragmentación de los procesos de toma de decisiones y la confusión de los roles administrativos. El sistema no daba acceso equitativo, carecía de una sólida planificación y administración, y el financiamiento era insuficiente. Las tasas de matriculación -del 64% para niños y del 57% para niñas- minimizan los problemas mucho más graves en las zonas de bajos ingresos y del norte del país. Con una población total de 160 millones de habitantes, Nigeria contribuye con alrededor del 30% al 40% de la cantidad total mundial de menores que no asisten a la escuela. Este sector tiene un alto nivel de maestros no calificados, un amplio rango del número de estudiantes por maestro y una baja eficacia en el gasto de los fondos para la educación pública. Si bien Nigeria goza de un crecimiento económico relativamente sólido, como el sexto exportador de petróleo del mundo, la economía estaba muy débil y Nigeria se ubicaba entre los países más pobres del mundo, con un ingreso per cápita de menos de US$500.
Solución
Se inició el Proyecto para el Sector de la Educación Estatal (i) (SESP, por sus siglas en inglés) con el fin de involucrar a las autoridades locales y estatales en el desarrollo de una fuerza laboral mediante la mejora de la educación primaria y secundaria. El proyecto se dirigió a los estados de Kaduna, Kano y Kwara debido a sus mayores carencias. A cada escuela de las áreas objetivo que tenían bajos niveles de participación, especialmente de las niñas, se les otorgó una mayor autonomía -mediante donaciones-, para desarrollar su propio equipo docente, obtener material escolar y mejorar la capacidad de gestión. La estrategia de “escuela integral” incorporó mejoras educativas y de infraestructura de forma simultánea. El Ministerio de Educación estatal y las autoridades del gobierno local también fueron beneficiarios del proyecto para ayudarlos en materia de desarrollo institucional, a través del fortalecimiento de los sistemas de información para la gestión educativa y de la oficina de inspectores, y el desarrollo de capacidades.
Resultados
Los niveles de participación mejoraron gracias al proyecto. Entre 2007 y 2011, las tasas de finalización de estudios primarios de las niñas aumentaron del:
- 17,4% al 41% en Kaduna
- 49% al 55% en Kano
- 45% al 50% en Kwara
En el caso de los niños, estas tasas subieron del:
- 23,5% al 52% en Kaduna
- 57% al 70,9% en Kano
- 50% al 57% en Kwara
Estos avances superaron fácilmente los objetivos en cada uno de los tres estados, los cuales también cumplieron el 83% de sus metas de alfabetización y conocimientos básicos de aritmética desde 2007. Los índices de finalización de los estudios secundarios tuvieron un progreso similar. En el caso de las niñas aumentaron del:
- 7% al 34,16% en Kaduna
- 2,82% al 8,67% en Kano
- 40% al 54% en Kwara
En el caso de los niños, estas cifras subieron del:
- 10% al 46,16% en Kaduna
- 20% al 36,09% en Kano
- 34% al 61% en Kwara
Asimismo, 1.974 escuelas implementaron los planes de desarrollo escolar aprobados y recibieron donaciones. En todos los estados, se capacitaron 6.456 maestros mediante un programa de desarrollo profesional, lo que llevó a que el 99,3% de los profesores utilizara eficazmente las guías para los planes de estudios.
Contribución del Grupo del Banco Mundial
La Asociación Internacional de Fomento (AIF) tuvo la oportunidad de aprovechar su gran experiencia en la participación del sector educativo para liderar el SESP y coordinar a los demás asociados en el desarrollo durante los programas específicos para cada estado. La AIF aportó aproximadamente el 97% del presupuesto (US$63,74 millones). Específicamente, US$19,09 millones se utilizaron en el desarrollo escolar, US$38,41 millones en el mejoramiento de la calidad, US$3,65 millones en el desarrollo institucional y US$4,25 millones en la gestión del proyecto.
Asociados
El Ministerio de Educación estatal de Nigeria desembolsó los recursos del proyecto. Las autoridades gubernamentales locales en las regiones objetivo constituyeron una parte integral del proyecto y se beneficiaron del apoyo para el fortalecimiento institucional. La sostenibilidad del proyecto se vio mejorada a través de la participación de asociados, como el Departamento de Desarrollo Internacional del Reino Unido (DIFD) y el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).
Próximos pasos
La operación posterior a la finalización del proyecto se incluyó en el programa del Ministerio de Educación estatal y del Consejo de Educación Básica Universal estatal, con recursos, equipos y logística de capacitación. El gobierno del estado de Kano inició las actividades de alimentación escolar y de reparto de uniformes gratuitos, a fin de lograr un aumento en las tasas de inscripción y finalización de estudios primarios entre las niñas. Los presupuestos de los estados sostendrán el desarrollo institucional que se logró con el proyecto.
Beneficiarios
El SESP ha apoyado programas a través de varios estados, incluidos el SDP y el SMBC. Estos proyectos han entregado textos de estudio, salas de clase adicionales y una oficina, y han aumentado la asistencia escolar y la participación de los padres.
“Las aulas se han descongestionado y tanto el maestro como los alumnos sienten que el ambiente es más propicio para aprender y enseñar;”, dijo un comerciante de Ungogo Gabas de la Autoridad del Gobierno Local de Ungogo en el estado de Kano. “Hay más estudiantes que antes del proyecto”.
Un carpintero del pueblo de Rimin Gata estuvo de acuerdo.
“Los maestros ahora pueden calificar las tareas de forma inmediata en clase a diferencia de lo que sucedía antes, cuando no había sillas ni escritorios y tenían que hacerlo en sus casas”, indicó.