Este informe describe las tendencias recientes de la pobreza en México y, basado en esta descripción, identifica tres áreas clave de políticas públicas necesarias para lograr dicho objetivo: crecimiento inclusivo, política social eficiente e infraestructura para enfrentar la vulnerabilidad.
1. Crecimiento rápido e inclusivo
Un crecimiento económico más rápido es fundamental para erradicar la pobreza en el corto y mediano plazo en México, pero no es suficiente. Es necesario que dicho crecimiento sea inclusivo, lo cual implica cerrar tres brechas principales en la participación económica y la productividad:
- Empleo femenino y oportunidades económicas para las mujeres: Promover la igualdad de género en el ámbito laboral es clave para un crecimiento inclusivo.
- Condiciones de vida de los hogares rurales: Mejorar las oportunidades económicas y la calidad de vida de los hogares rurales, especialmente de los dedicados a actividades agrícolas.
- Productividad y protección social de los trabajadores en el sector informal: Garantizar mejores condiciones para los trabajadores informales a través de políticas de inclusión y apoyo.
2. Política social más eficiente
La pobreza en México no se define sólo en términos monetarios, sino también de una manera multidimensional que incluye carencias sociales en educación, salud, vivienda, seguridad social y alimentaria. Este informe destaca que reducir las carencias en materia de seguridad social es fundamental para reducir rápidamente la pobreza extrema.
El informe documenta que los servicios de seguridad y asistencia social son muy asimétricos en términos de financiación y calidad de sus servicios. Las reformas en seguridad social -particularmente en salud- pueden apuntar a una cobertura de la población total, a un paquete similar de servicios para los diferentes grupos y a un rediseño en su financiación que genere recursos suficientes y que evite desincentivos a trabajar en el sector formal. Por otro lado, las reformas a la asistencia social pueden rediseñar algunos programas con el fin de aumentar su progresividad y suficiencia y con ello aumentar su impacto en la erradicación de la pobreza
3. Reducción de la vulnerabilidad a la pobreza
Esta es una tercera área de acción de política pública, en particular debido a los fenómenos relacionados con eventos climáticos. El reporte documenta estudios que estiman que al menos un tercio de la población mexicana es vulnerable a caer en pobreza debido a fenómenos climáticos. Por lo tanto, las políticas públicas deben tomar medidas no solo para reducir la pobreza, sino también para disminuir la vulnerabilidad a ésta Eventos climáticos severos pueden revertir los avances en la reducción de la pobreza. Esto amplia el enfoque de las políticas hacia la clases vulnerable y media, grupos de la población que también se encuentran expuestos a los peligros de los fenómenos climáticos severos. Las áreas de política para reducir la vulnerabilidad son
- Inversión en infraestructura: Mejorar servicios de saneamiento, transporte y acceso a servicios financieros, en particular en las zonas rurales.
- Protección social adaptativa: Desarrollar una protección social adaptativa que responda a los crecientes riesgos climáticos a través de mecanismos de aseguramiento y asistencia para hacerles frente antes, durante y después de que ocurran.
México cuenta con experiencia destacada en el diseño e implementación de políticas económicas y sociales, que puede acelerar la erradicación de la pobreza extrema. La erradicación de la pobreza extrema en el corto o mediano plazo es un reto significativo, pero al alcance de México. Lograrlo requiere que se realice el esfuerzo necesario para alcanzar una meta tan noble como prioritaria.
