La clase media mexicana creció en la última década

Osmaida Pineda Santiago tiene dos hijos pequeños. Ella y su esposo trabajan. Hace poco compraron una casa, en parte con un préstamo que están comenzando a devolver. “Nos estamos limitando mucho para poder salir justos, y no tener que necesitar que alguien nos apoye, si no para poder vivir bien”, explica.

Según su nivel de ingreso, su familia forma parte de la clase media mexicana. De acuerdo a un nuevo estudio del Banco Mundial, en América Latina la clase media abarca a personas que obtienen entre US$10 y US$50 por día y por persona.

Muchos latinoamericanos de clase media sueñan con tener su propia casa, y Osmaida acaba de lograrlo. Su casa en Oaxaca está decorada con falsas lagartijas por fuera e imágenes religiosas por dentro. La mesa de la sala principal devuelve juguetes, lápices y libros de ejercicios.

La construcción es de dos plantas, incluida una amplia cocina y una sala de estar con TV. La familia de Osmaida vive de manera confortable, pero no pueden permitirse lujos ni cosas superfluas.

“No nos podemos desviar y comprar otras cosas, porque ahora el gasto de la casa es fuerte... es escuela, gasolina y comida”, dice.

La desigualdad disminuye en México

De 2003 a 2009, la clase media — personas que no son pobres ni vulnerables aunque no llegan a ser ricos — creció un 50% en América Latina, más que nunca antes, de acuerdo a un nuevo informe del Banco Mundial, “Movilidad económica y el crecimiento de la clase media latinoamericana”.

La clase media mexicana está entre aquellas que crecieron en América Latina. En efecto, 17% de la población mexicana se unió a la clase media en la última década. Asimismo, la desigualdad en el país disminuyó en la última década, de acuerdo a estándares internacionales (unos 7 puntos en el coeficiente de Gini, el índice internacional que mide la desigualdad en ingresos), más que en Argentina o Brasil.

De acuerdo al informe, la clase media mexicana muestra una escolaridad promedio de apenas por debajo de 12 años.  Esto se compara con unos 6 años entre los pobres, 8 años entre los vulnerables — aquellos que, según los autores del estudio, ya no son pobres (ingresos de entre US$4 y US$10 por día), pero corren riesgo de volver a la pobreza — y unos 14 años en la clase alta.

Una vía de salida de la pobreza

Asimismo, la pobreza en América Latina disminuyo de más de 40% a 30% en una década, es decir que 50 millones de latinoamericanos salieron de la pobreza durante ese lapso. Esto significa que la clase media y los pobres representan ahora más o menos el mismo porcentaje de la población latinoamericana.

El estudio también concluye que al menos el 43% de los latinoamericanos cambiaron de clase social en más de diez años, la mayoría hacia una clase superior. Sin embargo, los autores del estudio apuntan a que la movilidad intergeneracional sigue siendo relativamente escasa.

La mayoría de los jóvenes de clase media en América Latina asisten a la escuela, indica el estudio. Para Osmaida, darles a sus hijos la oportunidad de ir a la escuela es muy importante. “Nos estamos esforzando para que vayan a una escuela particular, para que tengan una buena educación”, dice.