El Grupo Banco Mundial anuncia una nueva coalición de liderazgo de la fijación del precio del carbono en vísperas de la Cumbre sobre el Clima
Ciudad de Washington, 22 de septiembre de 2014. Setenta y tres gobiernos nacionales y 11 gobiernos regionales, responsables del 54 % del total de emisiones mundiales de gases de efecto invernadero, y más de 1000 empresas e inversionistas han manifestado su apoyo a la fijación del precio del carbono antes de la Cumbre sobre el Clima convocada por el secretario general de las Naciones Unidas.
Quienes respaldan la fijación del precio del carbono son responsables de las emisiones, como China, Rusia y la Unión Europea; economías en crecimiento, desde Indonesia y México hasta Sudáfrica, y algunos de los países más vulnerables, como Filipinas y los pequeños países insulares de Kiribati y Nauru. Por primera vez ellos se han unido a estados y provincias como California y Quebec, ciudades como Tokyo y Río de Janeiro, organizaciones no gubernamentales (ONG), como el Fondo de Defensa del Medio Ambiente y empresas muy conocidas, como Nokia, LG Electronics, Lego y Shell, para respaldar la fijación del precio del carbono.
“Al respaldar la fijación del precio del carbono, líderes de todo el mundo político y empresarial se han unido para enviar un mensaje claro de que vitalizarán sus economías para lograr un planeta más seguro, con menos contaminación y más próspero”, afirmó Jim Yong Kim, presidente del Grupo Banco Mundial. “Hoy vemos un verdadero impulso. Gobiernos que representan a casi la mitad de la población del mundo y a los que corresponde el 52 % del producto interno bruto (PIB) mundial han respaldado la fijación del precio del carbono como solución necesaria, aunque insuficiente, para hacer frente al cambio climático y seguir el rumbo de un crecimiento con bajo nivel de emisiones de carbono”.
El creciente apoyo es un reconocimiento claro de que la fijación del precio del carbono, ya sea en forma de impuestos a las emisiones de carbono, regímenes para el comercio de derechos de emisión u otros medios, es parte necesaria de la solución para impulsar las inversiones en una economía menos contaminante, y una base para el impulso de otras medidas relacionadas con el clima.
Para mantener el impulso, el Grupo Banco Mundial y la We Mean Business Coalition convocarán una nueva “coalición de liderazgo de la fijación del precio del carbono”.
“La coalición de liderazgo de la fijación del precio del carbono promoverá soluciones de fijación del precio del carbono, desde la terminación de la Cumbre mañana hasta la celebración de las negociaciones sobre el clima en París en 2015”, expresó el presidente Kim. “Los miembros intercambiarán experiencias, investigaciones y mejores prácticas y alentarán la acción en todos sus sectores y cadenas de suministro, y con sus vecinos y aliados”.
Los países han expresado su apoyo incluso alineándose en torno a la Put a Price on Carbon Statement (Declaración de poner precio a las emisiones de carbono). Las empresas han manifestado su apoyo alineándose en torno a dicha Declaración, el Comunicado sobre la tarificación de las emisiones de carbono, la iniciativa Cuidar el Clima, y la 2014 Global Investor Statement on Climate Change (Declaración de 2014 de inversionistas mundiales sobre el cambio climático). Veintiocho ONG también se han alineado en torno a la Declaración de poner precio a las emisiones de carbono, al igual que lo ha hecho ICLEI, una red de más de 1000 ciudades dedicadas al desarrollo sostenible.
“Suele escucharse que la fijación del precio del carbono es difícil”, manifestó Rachel Kyte, vicepresidenta y enviada especial para el cambio climático del Grupo Banco Mundial. “Hoy se puede observar que la economía es convincente y los líderes, electos o seleccionados, están encontrando la manera de administrar la política y los modelos empresariales para identificarse con nuestro futuro con bajo nivel de emisiones de carbono”.
Vea más información y la lista de quienes respaldan la fijación del precio del carbono en: https://www.worldbank.org/en/programs/pricing-carbon